Chrysler Daytona coches clásicos en venta

Historia del Chrysler Daytona

El Chrysler Daytona debutó en 1984 como un coupé deportivo de tracción delantera, basado en la plataforma G de Chrysler, una derivada de la K. Creado bajo la división Dodge, el Daytona heredó su nombre de la célebre competencia Daytona 500, atribuyéndose así una sólida asociación con las carreras y el rendimiento americano. Compartió base con el Chrysler Laser, su versión más lujosa, pero el Daytona puso el acento en la deportividad sin renunciar a la comodidad. En 1987 y 1992, el modelo fue rediseñado para mantenerse actualizado tanto en estética como en tecnología. Este deportivo cerró su producción en 1993, siendo reemplazado definitivamente en 1995 por el Dodge Avenger.

Evolución de la gama Daytona

El Daytona se introdujo para suplir al Dodge Challenger basado en Mitsubishi Galant, situándose entre el Charger y el Conquest de la gama americana. Su vida comercial abarcó desde 1984 hasta 1993, periodo en el que experimentó dos importantes restylings (1987 y 1992). La versión Chrysler Laser aportó lujo y equipamiento superior sobre la misma base técnica. Tras cesar la producción, el Avenger ocupó su sitio en la gama a partir de 1995.

Aspectos destacados del Chrysler Daytona

El Daytona une el toque deportivo de los 80 con una lista de equipamientos poco frecuente para la época: dirección asistida, asientos deportivos, control de crucero, climatizador y sistema de audio completo con cargador de CDs y radio con cassette de serie. Además, incorpora detalles prácticos como elevalunas eléctricos, ajuste eléctrico de asiento y techo corredizo. Esa combinación de confort, prestaciones y carácter lo distingue frente a otros modelos americanos de su franja temporal.

Datos técnicos

Ediciones especiales y variantes coleccionables

Si bien el Daytona disfrutó de varias evoluciones de diseño, no existen ediciones especialmente limitadas ni numeradas recogidas en los anuncios actuales, aunque versiones con equipamiento superior (inspiradas en el Chrysler Laser) pueden diferenciarse por detalles de lujo y sistemas eléctricos completos.

Motor, prestaciones y comportamiento dinámico

El Chrysler Daytona es sinónimo de prestaciones sólidas en la conducción deportiva americana de los 80 y 90. Equipado con motores de hasta 177 CV, ofrece aceleración destacable e ideal para trayectos largos, acompañado de una dirección asistida que facilita el manejo en todo momento. Los asientos deportivos y el chasis afinado hacen que el comportamiento sea eficaz tanto en carretera como en autopista, mientras que la selección de cambios (manual o automática) se adapta a distintos estilos de uso. El consumo, situado en torno a 10 l/100 km en ciudad y 8-9 l/100 km en autopista, está a la par con su categoría. Las versiones con más equipamiento, especialmente las inspiradas en el Chrysler Laser, destacan por los asientos deportivos y el ajuste eléctrico de los mismos, así como la presencia de tempomat y sistemas de audio avanzados para su época.

Interior, confort, exterior y diseño

El diseño del Daytona refleja la estética deportiva de finales de los 80, con carrocería hatchback 3 puertas, líneas angulosas y detalles típicos americanos. En el interior, los asientos deportivos, la tapicería mixta y el uso de materiales robustos subrayan el enfoque en el confort y la resistencia. Elementos de equipamiento como el techo solar, elevalunas eléctricos, climatizador y sistemas de audio con cargador de CDs denotan el cuidado en la experiencia de usuario. Los controles eléctricos y la disposición del salpicadero facilitan la conducción incluso en largos desplazamientos.

Otros aspectos relevantes

El coste del seguro para el Chrysler Daytona es considerado asequible para su segmento. Sin embargo, el impuesto de circulación puede ser algo elevado (aproximadamente 320 euros anuales en España según los ejemplos actuales), lo que conviene tener en cuenta al valorar el mantenimiento anual.

Resumen

El Chrysler Daytona representa una pieza diferenciada en el catálogo de clásicos americanos, combinando una larga lista de equipamientos, fuerte carácter deportivo y un diseño propio de su era. Su singularidad dentro de la gama Chrysler, la fiabilidad de su mecánica y la experiencia de conducción que ofrece, lo convierten en un modelo que no pasa desapercibido entre los entusiastas del automóvil clásico.