Packard Twelve coches clásicos en venta

Historia del Packard Twelve

El Packard Twelve, fabricado por la Packard Motor Car Company de Detroit, se lanzó por primera vez en 1916 como respuesta al deseo de modelos con motores de gran cilindrada. Esta serie, inicialmente conocida como 'Twin Six', marcó una nueva referencia en la producción de automóviles de lujo con motor V12. Tras una pausa en los años 20, Packard relanzó el Twelve en 1933 con soluciones tecnológicas avanzadas y una mayor variedad de carrocerías, adaptándose a los cambios en los gustos de la elite estadounidense. A medida que los tiempos cambiaban en la automoción americana, la construcción de carrocerías a medida fue dando paso a versiones más estandarizadas, aunque algunos clientes exigentes seguían optando por detalles exclusivos ensamblados por Dietrich sobre la base de Packard.

Evolución de las series Packard Twelve

La primera generación del Twelve (Twin Six) se desarrolló de 1916 a 1923, cubriendo una etapa dorada para Packard. En 1933, la segunda generación retomó el concepto V12 hasta 1939. Durante estos años, el Twelve se ofreció con varias denominaciones de serie: desde la 11.ª hasta la 16.ª serie. Entre ellas, destacan la 11.ª y la 12.ª serie, que constituyen el grueso de la producción y las más presentes en el mercado actual. El modelo fue sustituido por modelos menos costosos cuando el mercado cambió y la demanda de vehículos ultralujosos disminuyó al terminar la década de 1930.

Aspectos destacados del Packard Twelve

El mayor atractivo del Twelve reside en su motor V12 de funcionamiento aterciopelado, una característica única entre los fabricantes estadounidenses de entonces. La sólida base técnica, combinada con la posibilidad de elegir o encargar carrocerías semipersonalizadas, convertía cada Packard Twelve en una pieza única. El renombre de la marca por su calidad de construcción y avanzadas innovaciones, como frenos hidráulicos y sistemas eléctricos fiables, elevó al Twelve como referencia de la ingeniería americana en los años 30.

Datos técnicos del Packard Twelve

Ediciones especiales y modelos coleccionables

En la gama Twelve fueron comunes las versiones semipersonalizadas, especialmente en los años 30. Carroceros como Dietrich jugaban un papel destacado, ensamblando cuerpos exclusivos sobre la plataforma Packard, añadiendo detalles de lujo a gusto del cliente. Estas versiones semipersonalizadas hoy en día suelen ser altamente valoradas por su rareza y originalidad, aunque durante su época existía una tendencia creciente hacia la estandarización de carrocerías.

Puntos débiles y cuestiones típicas

La documentación disponible no menciona debilidades recurrentes específicas del Packard Twelve. Es recomendable revisar cuidadosamente el estado mecánico de componentes originales, sobre todo motor y transmisión, así como el sistema eléctrico y el estado de la carrocería resistentes al paso del tiempo.

Motor, prestaciones y conducción

El motor V12 ofrece una entrega de potencia especialmente suave, destacando por la robustez y elasticidad desde bajas revoluciones. La experiencia de conducción combina una suspensión confortable y dirección precisa para su época. La caja de cambios manual permite aprovechar el empuje del motor en largos viajes. Gracias a dimensiones generosas y un chasis pensado para automóviles de lujo, la estabilidad en carretera era sobresaliente. Modelos más buscados dentro de la gama son la 14.ª serie, que concentra el 45,7% de la demanda de visitas y que destaca por ser la evolución más refinada de la saga. La 11.ª y 12.ª serie siguen siendo las más presentes como oferta en el mercado actual.

Diseño interior, confort y acabados exteriores

El interior de un Packard Twelve está dominado por materiales nobles, como maderas auténticas y tapicerías en cuero natural, siguiendo los estándares de lujo de los años 30. El exterior se distingue por líneas elegantes y proporciones majestuosas propias de la era Art Decó. Entre las opciones y equipamientos destacan carrocerías descapotables, limusinas y modelos customizados con detalles cromados, llantas de radios y accesorios adaptados al gusto del comprador original. El trabajo de carroceros como Dietrich se reconocía por toques únicos, como ventanillas traseras especiales o acabados personalizados.

Más información relevante

En la historia del Packard Twelve destaca la transición de carrocerías a medida a una producción más estandarizada, reflejo de la evolución del mercado del lujo automovilístico estadounidense. Estos vehículos no solo eran medios de transporte sino auténticas declaraciones de estatus, reflejando la cima de la técnica y el diseño de su época.

Resumen

El Packard Twelve representa una síntesis de ingeniería avanzada, acabados de lujo y tradición artesanal norteamericana. Sus motores V12, la posibilidad de carrocería semipersonalizada y la calidad reconocida a nivel internacional lo convierten en uno de los coches más admirados entre los entusiastas de clásicos estadounidenses. La presencia destacada de la 11.ª, 12.ª y 14.ª serie en la oferta y demanda actual subraya la vigencia de su atractivo en el mercado de clásicos.