Studebaker Avanti – Comprar coches clásicos

Historia y origen del Studebaker Avanti

El Studebaker Avanti fue desarrollado por la Studebaker Corporation como respuesta a la necesidad de crear un vehículo diferenciador ante la adversidad financiera de la marca a inicios de los años 60. Bajo la dirección del diseñador industrial francés Raymond Loewy, el modelo fue concebido en un tiempo récord de cinco semanas en Palm Springs. Su diseño rompía con las convenciones estadounidenses: presentaba una silueta aerodinámica, ausencia de parrilla convencional y soluciones de seguridad y tecnología por delante de su época. Durante su presentación en 1962, su imagen futurista despertó atención y numerosas reservas, aunque problemas de fabricación retrasaron las entregas y redujeron la producción a solo 4.643 unidades hasta el cese en diciembre de 1963.

Evolución de la gama Avanti

El Avanti se lanzó en versión coupé de dos puertas sobre la base estructural del Studebaker Lark Convertible de 1953. No hubo sustituto directo tras el cierre de Studebaker, pero el modelo sobrevivió gracias a ex empleados y concesionarios, quienes compraron los derechos y componentes para crear el Avanti II a partir de 1964. Este modelo artesanal evolucionó en motorización y detalles, y se fabricó en pequeñas series hasta principios de los años 90, incorporando motores Chevrolet y algunas variantes como descapotable y berlina. Entre las evoluciones de fábrica destacan las diferencias de los marcos de faros: redondos hasta julio de 1963, cuadrados en los últimos ejemplares de la producción original.

Particularidades y datos destacados del Studebaker Avanti

El Avanti se distingue por su avanzada carrocería de fibra de vidrio, frenos de disco delanteros de serie (una primicia en EE. UU.), presencia de barras de seguridad integradas y puertas con bloqueo específico de seguridad. Su frontal liso, sin parrilla, anticipaba soluciones de diseño que décadas después serían habituales en los superdeportivos. El modelo R2 es especialmente buscado por su motor V8 sobrealimentado, que le otorga altas prestaciones. La proporción de anuncios de Avanti con código de fabricante R-2 representa el 50% de la oferta total de Avantis de Studebaker, seguido del R-1 con un 33% y el R-3 con un 11%. En cuanto a la demanda, destaca el interés por el Avanti R-1, que acapara casi el 67% de las vistas entre aficionados y coleccionistas, seguido por el R-2 con un 30%.

Datos técnicos del Studebaker Avanti

Ediciones especiales y modelos de colección

Entre las variantes más buscadas destaca el Avanti R-2 por su motor sobrealimentado McCulloch, que permite una aceleración 0-100 km/h en menos de 8 segundos y una velocidad máxima de hasta 240 km/h. Algunas unidades excepcionales forman parte de las primeras series con faros redondos (junio 1962-julio 1963), reconocibles por su rareza. Después del cierre de Studebaker, el Avanti II continuó la saga con mecánicas Chevrolet y producciones limitadas.

Puntos débiles y consideraciones de mantenimiento

La producción acelerada y los retos técnicos trajeron complicaciones en el ajuste de los paneles de fibra de vidrio y en la estanqueidad—especialmente en la adaptación de la luna trasera y los acabados de puertas y faros. Además, las unidades pueden presentar desgaste en sistemas eléctricos y del tren motriz debido a la antigüedad y a posibles reparaciones fuera de especificación original. Recomendable revisar la integridad estructural de la carrocería y el estado de los frenos, así como la procedencia y mantenimiento del motor (especialmente en versiones sobrealimentadas).

Motor, comportamiento y conducción

El Studebaker Avanti ofrece una experiencia de conducción singular para los años 60: con el V8 4.7 litros y la opción sobrealimentada, su rendimiento supera holgadamente lo que ofrecía la competencia doméstica de la época. El Avanti R-2, con compresor McCulloch, ofrece una aceleración de 0 a 100 km/h en menos de 8 segundos y alcanza hasta 240 km/h, cifras insólitas entre los coupés americanos del momento. La disposición de frenos de disco delanteros contribuye a una mayor confianza al frenar respecto a vehículos contemporáneos con frenos de tambor. El chasis derivado del Lark Convertible sostiene de manera efectiva el conjunto, aunque conviene recordar que la tecnología de suspensión y neumáticos sigue los estándares de la época, lo que implica un comportamiento menos filtrado y direccional frente a GT europeos. Los modelos más interesantes a nivel técnico son el Avanti R-2 (sobrealimentado, 290 CV) y el Avanti R-1 (aspirado, también con respuesta deportiva), ambos dotados de bastidor robusto y frenos avanzados para su tiempo.

Diseño exterior, interior y opciones

Raymond Loewy marcó una etapa en el diseño automovilístico norteamericano con el Avanti. Domina la aerodinámica en el perfil lateral, el frontal sin parrilla y una caída suave en la trasera. Materiales internos con acolchados extra y detalles metálicos para mayor confort y sensación de modernidad. Existían opciones como cinturones de seguridad, aire acondicionado y radios de alta gama. Los colores varían entre tonos perlados, rojos llamativos y plateados, acompañados de tapizados en cuero y tejidos resistentes. El interior cuenta con una instrumentación completa, asientos individuales ergonómicos y detalles propios de un vehículo de alta gama de la época.

Más información relevante

El Avanti estuvo asociado a diversas personalidades del momento, como Frank Sinatra o Ian Fleming. También fue el primer modelo de serie regalado al ganador de las 500 Millas de Indianápolis (1962). Su nombre, de origen italiano, refuerza el mensaje de progreso y atrevimiento que la marca pretendía transmitir.

Resumen sobre el Studebaker Avanti

El Studebaker Avanti representa una de las apuestas más arriesgadas y adelantadas de la industria automotriz estadounidense de los años 60. Con su diseño único, tecnología pionera y espíritu innovador, sigue siendo un ejemplar distinguido y relativamente escaso en el mercado de clásicos. La fuerte demanda de las versiones R-1 y R-2 confirma el atractivo entre coleccionistas y expertos. Un coupé para quienes buscan singularidad y soluciones fuera de lo común en el mundo del automóvil clásico.