Lotus 22 coches clásicos en venta

Historia e introducción del Lotus 22

El Lotus 22 fue introducido en 1962 con un objetivo claro: dominar las competiciones de Fórmula Junior. Colin Chapman y su equipo tomaron como base el Lotus 20 y realizaron profundas revisiones, centrándose en mejorar la dinámica y la tecnología de chasis. El resultado fue un vehículo más avanzado, con frenos de disco en las cuatro ruedas, un cárter seco para el motor y una carrocería suavizada que optimizaba la aerodinámica para los estándares de principios de los 60. Solo se produjeron 77 unidades, lo que lo convierte en una rareza en cualquier parrilla histórica.

Historia de la gama Lotus 22

El modelo 22 fue la evolución lógica del Lotus 20, con el que compartía muchos conceptos estructurales, pero incorporaba mejoras que lo consolidaron como referencia en la Fórmula Junior. No tuvo un sucesor directo, ya que la siguiente gran apuesta de Lotus fue el 27, orientado a nuevas normativas y escenarios de competición.

Particularidades del Lotus 22

El Lotus 22 introdujo varias innovaciones técnicas en el automovilismo de la época: el uso de frenos de disco en ambos ejes, suspensión trasera con top link y juntas de caucho que mejoraban la fiabilidad y el control, y motor desplazado con cárter seco para reducir el centro de gravedad. El diseño aerodinámico de la carrocería, más suave que su predecesor, optimizaba la eficiencia a altas velocidades.

Datos técnicos del Lotus 22

Series especiales y ediciones limitadas

No existen ediciones especiales oficialmente reconocidas del Lotus 22, aunque algunas unidades cuentan con historiales de competición significativos o reconstrucciones fieles para competiciones de vehículos históricos.

Puntos débiles y problemas conocidos

No se dispone de información documentada sobre debilidades específicas del Lotus 22 en nuestras fuentes actuales. Sin embargo, como clásico de competición, requieren inspección regular en soldaduras del chasis, juntas de suspensión y componentes del sistema de frenos, así como una cuidada atención al estado del cárter seco y la transmisión.

Motor, prestaciones, transmisión y conducción

El Lotus 22 es conocido por su agilidad extrema y su alto nivel de precisión en el paso por curva. El motor central inclinado facilita una bajísima altura del conjunto, lo que se traduce en un comportamiento muy reactivo y estable en circuitos. Su ligereza brinda unas aceleraciones notorias y una capacidad de frenada sobresaliente gracias a los discos en ambos ejes. El Lotus 22 es el único representante de su serie, con todas las unidades compitiendo en igualdad de condiciones dentro de las carreras históricas de monoplazas.

Diseño exterior, interior y acabados

La carrocería del Lotus 22 se caracteriza por sus líneas fluidas y rectas, pensadas para maximizar la penetración aerodinámica en pista. El interior es espartano, con lo imprescindible para la competición: un asiento funcional, instrumentación clara y accesible, y mandos de competición. La elección de materiales ligeros y la pintura monocroma reflejan la máxima obsesión de Lotus por la reducción de peso y la eficiencia.

Otros elementos relevantes

En algunas restauraciones y preparaciones actuales del Lotus 22 se pueden encontrar mejoras como instrumentación digital oculta o sistemas modernos de ignición, aunque siempre respetando la configuración original para cumplir normativas FIA de históricos.

Resumen

El Lotus 22 representa un hito en la ingeniería automovilística de competición de principios de los 60, destacando por su bajo peso, chasis evolucionado y configuración técnica innovadora. Con solo 77 unidades fabricadas y un legado plenamente ligado a la Fórmula Junior, sigue siendo una pieza central en carreras históricas y encuentros de clásicos deportivos.