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Historia del Ferrari 288

El Ferrari 288 GTO (Gran Turismo Omologato) simboliza un punto crucial en la historia de los deportivos de Maranello. Lanzado en el Salón del Automóvil de Ginebra en 1984, el 288 GTO se diseñó inicialmente para la homologación en el Grupo B de rally, aunque finalmente la categoría fue cancelada. Para la carrocería, se adoptaron plásticos reforzados con fibra utilizados por primera vez en un Ferrari de carretera, influencia directa de la tecnología de la Fórmula 1. La producción terminó en 1985, con 272 unidades, y se fabricaron 5 GTO Evoluzione exclusivamente para competición. El último 288 GTO fue entregado a Niki Lauda como obsequio de la marca.

Evolución de la serie 288

El Ferrari 288 GTO fue un sucesor conceptual del famoso 250 GTO de los años 60, recuperando la denominación GTO más de dos décadas después. Aunque visualmente recuerda al 308 GTB, el 288 presenta una estructura y una mecánica profundamente distintas, marcada por el uso de materiales avanzados y un motor V8 biturbo especialmente desarrollado.

Características destacadas y estadísticas de mercado

La principal seña de identidad del 288 GTO es su combinación de tecnología avanzada para la época y una producción extremadamente limitada. Fue el primer Ferrari de calle en utilizar compuestos plásticos reforzados a semejanza de la F1. Su motor V8 de 2,8 litros con doble turbo entregaba 400 CV, logrando cifras de aceleración y velocidad punta sobresalientes para mediados de los años 80. Se entregó únicamente en color Rosso Corsa, y sus neumáticos muy anchos requirieron aletas ensanchadas poco habituales en modelos precedentes.

Datos técnicos del Ferrari 288 GTO

Ediciones especiales y versiones coleccionables

De los 277 ejemplares del 288 GTO, cinco fueron construidos como GTO Evoluzione, orientados exclusivamente a la competición y dotados de desarrollos mecánicos y aerodinámicos aún más radicales. Estas versiones son extremadamente raras y juegan un papel importante en la historia del desarrollo tecnológico de Ferrari.

Motor, rendimiento y comportamiento dinámico

El 288 GTO equipa un motor V8 biturbo de aleación ligera, que produce 400 CV y proporciona prestaciones que superan los estándares de su época. La caja de cambios manual de cinco velocidades, con diferencial autoblocante y embrague doble, asegura un control preciso de la potencia. La suspensión y el chasis, diseñados para competición, transmiten sensaciones muy directas, mientras que la ligereza y la distribución de pesos permiten un paso por curva y una aceleración excepcionales. El 288 GTO ‘stradale’ (de calle) es el referente absoluto de la gama, mientras que las versiones Evoluzione, aunque pensadas para circuito, son auténticos laboratorios rodantes y precedieron la tecnología que se vio después en el F40.

Diseño, interior y equipamiento especial

El diseño del 288 GTO es obra del equipo de Pininfarina y representa una simbiosis de líneas clásicas de Ferrari con soluciones propias de los vehículos de competición. Las aletas ensanchadas y los elementos aerodinámicos evidencian su orientación deportiva. El uso de materiales como kevlar y fibra de vidrio supuso una auténtica revolución. El interior es austero y orientado a la conducción, aunque se puede encontrar con elementos exclusivos según el pedido del cliente original. El tono Rosso Corsa es el único color de fábrica, en línea con la tradición deportiva italiana.

Resumen: Ferrari 288 GTO

El Ferrari 288 es uno de los modelos más avanzados y radicales de la marca durante los años ochenta, combinando materiales de última generación, un motor V8 biturbo exclusivo y una producción limitada muy valorada. Su orientación al alto rendimiento y su singularidad lo posicionan como un modelo de culto dentro de la historia de Ferrari, especialmente buscado en mercados especializados tanto nacionales como internacionales.