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Rover 105 - Comprar coche clásico

El Rover 105, perteneciente a la serie P4, representa el cénit de la elegancia británica en los años 50. Con solo 1.736 unidades fabricadas en 1959 como RHD, destaca por su motor de seis cilindros en línea, lujosos interiores en cuero rojo y detalles en nogal africano. Un coche que aún impresiona por su silencioso funcionamiento y su cuidada manufactura.

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Imagen 1/7 de Rover 105S (1958)

1958 | Rover 105S

Rover - P4 105 S - NO RESERVE - 1958

Precio a peticiónel año pasado
🇳🇱
Vendedor
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Imagen 1/22 de Rover 105S (1959)

1959 | Rover 105S

1959 Rover P4 105 M/OD. Unique Classic Car, Genuine 9,049 miles! RESERVED

Precio a peticiónhace 3 años
🇬🇧
Vendedor
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Imagen 1/19 de Rover 105S (1959)

1959 | Rover 105S

1959 Rover 105 P4 Saloon. Manual / Overdrive. Free U.K Delivery.

6838 €hace 7 años
🇬🇧
Vendedor

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Historia y origen del Rover 105

El Rover 105 forma parte de la reconocida serie P4 de Rover, una gama de berlinas de lujo de tamaño medio producidas entre 1949 y 1964 bajo la dirección de Gordon Bashford. Nacido en la posguerra, el modelo 105 aportó refinamiento técnico y estética clásica, destacando en el sector de vehículos premium por su atención al detalle y la calidad de sus acabados. En 1959, el 105 se ofrecía como una de las variantes menos comunes, ensamblándose únicamente 1.736 unidades con volante a la derecha para el mercado británico, lo cual aumenta su exclusividad y atractivo para los coleccionistas.

Historia del modelo Rover 105

Dentro de la gama P4, el 105 se posicionó como una evolución técnica y de lujo respecto a sus predecesores. Su motor de 2,6 litros y configuración de seis cilindros en línea lo separaba notablemente de otros modelos de la misma serie, entregando 108 CV y una velocidad máxima cercana a los 160 km/h. El P4 fue reemplazado finalmente por la serie P5, que apostaría aún más por la sofisticación y el confort, pero el 105 sigue resaltando por su combinación única de prestaciones y lujo artesanal.

Aspectos destacados del Rover 105

Con su combinación de pintura bicolor, detalles cromados y materiales nobles en el interior, el Rover 105 elevaba los estándares de la época. El equipamiento incluía frenos asistidos, asientos individuales con reposabrazos integrados, kit de herramientas original y accesorios de fábrica como alfombrillas y manuales. Fue elogiado por la calidad de construcción casi al nivel de Rolls-Royce.

En términos de estadísticas, el Rover 105 cubre el 100 % tanto de la oferta como de la demanda dentro de la serie P4 de Rover en nuestro portal, indicando que la totalidad de los listados y consultas sobre P4 se centran justamente en este modelo, lo que demuestra su carácter único dentro de la familia.

Datos técnicos del Rover 105

Ediciones especiales y modelos coleccionables

El Rover 105 ya en sí es una edición especial dentro de la serie P4 por su bajo número de unidades fabricadas en 1959. Además, algunos ejemplares lucían combinaciones de colores especiales y detalles de acabado únicos que los hacen especialmente atractivos para los entusiastas.

Puntos débiles y problemas comunes

No se han reportado debilidades específicas en los datos actuales, lo que destaca la calidad duradera de la manufactura tradicional de Rover en la serie 105. Sin embargo, como en todo clásico, es fundamental comprobar el estado de la carrocería, los ajustes de puertas y ventana, y el correcto funcionamiento de la mecánica y los sistemas eléctricos.

Motor, prestaciones y manejo

El Rover 105 destaca por su sedoso motor de 2,6 litros y seis cilindros, que proporciona un funcionamiento suave y silencioso incluso al ralentí. La caja manual de 4 relaciones con overdrive permite un avance relajado en autovía, y el chasis, junto con la suspensión, brinda un confort superior a la media de los autos de la época. La dirección es precisa y permite maniobrar cómodamente para su tamaño. Las frenos de tambor, asistidos por servo, ofrecen una frenada predecible. Se ha comparado el comportamiento global del coche con modelos de lujo británicos de mayor rango. El Rover 105 sobresale no solo por su motor, sino también por su lujoso equipamiento interior y atención al detalle en cada acabado.

Diseño exterior, interior y confort

La elegancia del Rover 105 está presente en su combinación de colores bicolor, la abundancia de cromados originales y el emblema Rover en las tapacubos de acero de 15 pulgadas. El interior mezcla cuero rojo de alta calidad en los asientos con madera africana de nogal en el salpicadero y paneles de puertas. El habitáculo ofrece detalles de artesanía como las alfombrillas hechas a medida, viseras para el sol, y hasta un completo kit de herramientas integrado bajo el salpicadero. El aspecto general, tanto dentro como fuera, refleja la sofisticación y la tradición británica de la época.

Otros datos de interés sobre el Rover 105

Parte del equipamiento original incluía literatura de a bordo como manuales de usuario, directorios de concesionarios o el ticket original de la línea de producción, detalles muy valorados entre coleccionistas y puristas del modelo.

Resumen

El Rover 105 de 1959 es, por fabricación y atributos, una de las berlinas clásicas más distinguidas de su generación. Su motor, refinamiento en interiores y tradición artesanal siguen valiendo reconocimiento entre los aficionados a los clásicos, siendo el modelo de referencia entre los Rover P4 tanto por su presencia en el mercado como por su exclusividad.