Brennabor Juwel Oldtimer kaufen

Historia del Brennabor Juwel

El Brennabor Juwel 6 debutó en 1929 como sucesor directo de la serie A-Typ (Typ A, Typ AL) dentro de la gama superior de la clase media de la marca alemana Brennabor. Su denominación oficial fue Typ B. La producción se mantuvo hasta 1932 y, tras aproximadamente 3.000 unidades construidas, la marca presentó al año siguiente el Brennabor 2,5 Liter como reemplazo. El Juwel evidenció el cambio de década con un diseño robusto y múltiples versiones de carrocería, lo que le proporcionó una flexibilidad notable para la época, adaptándose tanto a usos formales como a ocasiones de ocio.

Evolución de la gama Juwel

El Juwel 6 continuó la tradición iniciada por los modelos A-Typ y, al concluir su ciclo de vida, cedió el testigo al Brennabor 2,5 Liter en 1933. Las variantes disponibles del Juwel 6 incluían limusina, cabriolimousine y cabrio, en configuración corta (4,05 m) o larga (4,15 m, denominada Juwel 6 Extra), permitiendo así a los clientes elegir entre practicidad diaria o el lujo de mayor espacio. A diferencia de sucesores más modernos, el Juwel 6 no contó con una evolución extensa ni grandes modernizaciones durante su producción.

Particularidades del Brennabor Juwel

Este modelo destacaba por su motor de seis cilindros en línea SV y la opción, bajo pedido, de contar con un propulsor de más de tres litros y 55 CV, derivado de los modelos ASK y ALK. El chasis de acero prensado en U y las suspensiones de ballestas semielípticas garantizaban robustez, mientras que el sistema de frenos mecánicos actuaba en las cuatro ruedas, algo avanzado para el periodo. Sus distintas versiones de carrocería (limusina de cuatro puertas, cabriolimousine, cabrio de dos puertas) y tamaños (estándar y Extra) muestran la diversidad que Brennabor quería ofrecer a sus clientes.

Datos técnicos del Brennabor Juwel

Ediciones especiales y variantes coleccionables

La versión Juwel 6 Extra, con carrocería alargada, se considera la variante más exclusiva del modelo, dirigida a clientes que buscaban un mayor confort y presencia. Aunque no se documentan series limitadas, la disponibilidad de motores superiores bajo pedido añadía un toque de distinción para entendidos.

Puntos débiles y problemas frecuentes

No se documentan debilidades específicas en las fuentes disponibles, aunque los clásicos de la época suelen requerir atención especial en sistemas de freno mecánico, suspensión y corrosión del chasis. Los recambios pueden ser escasos, especialmente para componentes de motor y carrocería poco habituales.

Motor, transmisión y comportamiento en carretera

El motor de seis cilindros SV aportaba un equilibrio entre suavidad y prestaciones para su tiempo, permitiendo una velocidad máxima de 85 km/h—suficiente para la red vial de la época. La transmisión manual de tres marchas y el eje trasero motriz reflejaban los estándares tecnológicos de finales de los años 20. Las suspensiones de ballestas semielípticas y el chasis rígido daban como resultado una conducción firme, pensada para robustez más que para comodidad moderna. Las variantes con motor de mayor cilindrada y la versión Juwel 6 Extra destacan por su rareza y mayor nivel de prestaciones.

Diseño exterior, interior y equipamiento

El Juwel 6 presenta líneas sobrias y equilibradas, con amplio parabrisas vertical y pasos de rueda pronunciados, típicos del periodo prebélico. La variedad de carrocerías—incluidas versiones descapotables—aportaba flexibilidad y cierta distinción. La escasa documentación sobre el interior deja entrever acabados funcionales y resistentes, alineados con el diseño utilitario alemán. Las versiones Extra mayoritarias ofrecían más espacio y eran vistas como opciones de representación para empresarios u oficiales. No se conocen colores o tapizados específicos asociados, ni tampoco accesorios o equipamientos extra, más allá de las variantes principales de carrocería.

Otros aspectos relevantes

El Brennabor Juwel es el único modelo actualmente representado en el mercado de clásicos de la marca, lo que refuerza su estatus singular entre los coleccionistas y aficionados al automovilismo histórico alemán.

Resumen

El Brennabor Juwel combina la ingeniería tradicional alemana de entreguerras con opciones de carrocería atractivas para la época, siendo hoy el representante absoluto de la marca en los listados de clásicos. Su configuración mecánica, la posibilidad de versiones alargadas y motorizaciones superiores hacen de cada unidad un testimonio técnico y cultural del inicio de la década de 1930.