Renault Dauphine: Comprar clásicos

Historia del Renault Dauphine

El Renault Dauphine salió al mercado en 1956 como la apuesta francesa para motorizar a las familias y sigue siendo un referente en la evolución del automóvil europeo. Se diseñó como sucesor del exitoso Renault 4CV, pero alcanzó cotas de producción y exportación que ningún modelo francés había logrado hasta entonces. Su nombre, 'Dauphine', hace referencia a la heredera del trono francés, posicionando el modelo como el nuevo buque insignia de la marca. Entre los hitos más destacados de su historia figura la exportación de 150.000 unidades a Alemania y el hecho de que su producción total superó los 2,1 millones de coches hasta 1967. Fue especialmente apreciado tanto por su economía de uso como por la variedad de colores y acabados, resultado del trabajo de la artista Paule Marrot en el desarrollo de interiores y paletas cromáticas.

Evolución de la gama y generaciones

El desarrollo del Dauphine comenzó en 1949 bajo el nombre de 'Proyecto 109', con modernización continua hasta dejar atrás al Renault 4CV, su predecesor. Se mantuvo en el catálogo hasta 1967, a la par que se introdujeron variantes como la lujosa Ondine o los modelos deportivos Gordini. No existió un reemplazo directo al acabar su producción, pero sí abrió camino para modelos como el Renault 4 o el Renault 8, que adoptaron su filosofía compacta y polivalente. Cabe señalar que la existencia de la versión Rallye y los múltiples cambios mecánicos y de equipamiento ilustran la adaptación del Dauphine a las nuevas exigencias del mercado de los años 60.

Particularidades y cifras relevantes del Renault Dauphine

El Dauphine destacó por su configuración de motor trasero y tracción trasera en un sedán de cuatro puertas, algo inusual en su segmento. Su chasis ligero de aproximadamente 700 kg ayudaba a la agilidad, y la gama ofrecía desde elecciones prácticas hasta alternativas deportivas como el Gordini, con motores de hasta 47 CV. Las versiones Gordini eran fácilmente reconocibles por detalles como las franjas deportivas. El motor de cuatro cilindros en línea, combinado con caja de 4 marchas y refrigeración por agua, aseguraba fiabilidad y un funcionamiento silencioso.

Datos técnicos del Renault Dauphine

Ediciones especiales y variantes de coleccionista

Cabe mencionar la versión Gordini, desarrollada por el reputado preparador y piloto Amédée Gordini. Ofrecía una puesta a punto deportiva y fue empleada con éxito en pruebas de rally gracias a su motor de hasta 47 CV. Por otro lado, la Ondine se lanzó como versión de lujo, puntualizando el confort interior con asientos más cómodos y respaldo regulable. Hubo ediciones limitadas, como la Rallye 1093, enfocadas exclusivamente a la competición con mejoras en transmisión y mecánica.

Motor, comportamiento y conducción

Gracias a su motor trasero y peso contenido, el Dauphine ofrece una conducción ágil y un tacto peculiar, especialmente en las versiones Gordini. El reparto de pesos trasero permite un buen agarre en curva, aunque exige atención al límite por tendencia al sobreviraje. Su caja manual de 4 velocidades es precisa y, si bien la potencia para estándares actuales es modesta, en la época resultaba adecuada tanto para uso diario como para pequeñas gestas deportivas. El consumo de combustible es bajo para su segmento. Versiones destacadas:

• Dauphine Gordini: enfoque deportivo, hasta 47 CV, imagen diferenciada
• Dauphine Ondine: equipamiento superior, acabados exclusivos
• Rallye 1093: limitada, máxima potencia y especificaciones para competición

Diseño, confort y acabados interiores

El diseño del Dauphine estuvo marcado por un enfoque moderno respecto a su predecesor, el 4CV. Se le dotó de líneas redondeadas y detalles minimalistas, faros circulares y elementos marcadamente franceses tanto fuera como dentro. El trabajo de la diseñadora Paule Marrot fue clave para el lenguaje visual: colores exclusivos (Bahamas Yellow, Trinidad Red, Borneo Green), tejidos especiales para los asientos y el distintivo de tres delfines sobre corona en el volante y frontal. Las versiones Ondine ofrecían más confort y equipamiento, como asientos con regulador de respaldo. Entre los accesorios, existían kit de radios y embellecedores específicos.

Otros aspectos relevantes

La producción global del Dauphine abarcó incluso fábricas en América Latina, lo que facilitó su presencia internacional. Fue uno de los primeros coches pequeños en ofrecer tal variedad de acabados, motorizaciones y ediciones, y su presencia en exportaciones contribuyó al desarrollo de la marca Renault fuera de Francia.

Resumen

El Renault Dauphine representa la síntesis de la ingeniería francesa de los años 50 y 60: robusto, ligero y con un toque estilístico único. Desde sus versiones estándar a las variantes Gordini y Ondine, combina sencillez, posibilidades de personalización y una experiencia de conducción típica del motor trasero. Es un modelo especialmente apreciado por quienes valoran la historia, el diseño singular y la mecánica sencilla con especial carisma.