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Datsun Fairlady – Comprar Clásicos
El Datsun Fairlady es una serie de roadsters japoneses producidos entre 1959 y 1970, reconocidos por su espíritu deportivo, mecánica fiable y su clara orientación hacia la conducción dinámica, compitiendo directamente con modelos británicos y europeos. En nuestra selección puedes encontrar tanto unidades muy bien conservadas como ejemplares en estado original o incluso no restaurados, lo que asegura una excelente base para proyectos de restauración o para disfrutar del tacto genuino de la época.
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1969 | Datsun Fairlady 1600
Datsun Fairlady 1600 SPL311

1966 | Datsun Fairlady 1600
Datsun-1600 Fairlady 03140

1966 | Datsun Fairlady 1600
Datsun-1600 Fairlady restored
Referencias de anuncios de "Datsun Fairlady" en Classic Trader
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1970 | Datsun Fairlady 2000
1970 Datsun Fairlady Z432
1964 | Datsun Fairlady 1500
Datsun-1600 Fairlady Red
1969 | Datsun Fairlady 1600
Oldtimer Datsun Fairlady 1600 | Onderhoud bekend | Goede staat | 1
1969 | Datsun Fairlady 1600
Datsun - Fairlady 1600 - 1969
1967 | Datsun Fairlady 1600
Datsun Fairlady
1968 | Datsun Fairlady 2000
Datsun-2000 Fairlady blue
1969 | Datsun Fairlady 1600
Oldtimer Datsun Fairlady 1600 | Onderhoud bekend | Goede staat | 1
1969 | Datsun Fairlady 1600
DATSUN ROADSTER FAIRLADY 1969
1969 | Datsun Fairlady 1600
Oldtimer Datsun 1600 Fairlady
1969 | Datsun Fairlady 1600
Oldtimer Datsun Fairlady 1600
Historia y origen del Datsun Fairlady
El Datsun Fairlady surge en 1959, primero como modelo S211, en un contexto donde Nissan buscaba rivalizar los roadsters europeos como MG o Triumph, pero con un enfoque propio japonés. El debut en el mercado marcó la transición de Nissan hacia el segmento deportivo, aprovechando una mecánica sencilla y soluciones robustas. El nombre Fairlady se inspiró en el célebre musical de Broadway "My Fair Lady" y simbolizó el esfuerzo de la marca por ganarse al público global, especialmente en Japón, Australia y posteriormente en América. La primera generación fue construida casi artesanalmente y en números muy limitados.
Evolución del modelo Fairlady
Tras el S211 inicial, la gama Fairlady incluyó el SPL212 con carrocería de acero y motor 1.2L, consolidándose en 1961 como una serie permanente de Nissan. Desde 1963, aparecen los modelos Fairlady 1500 (SP310), 1600 (SP311) y 2000 (SR311), para responder a diferentes mercados y exigencias de potencia. El Fairlady 2000, lanzado en 1967, ofrecía motor U20 de 2 litros y fue utilizado con éxito en las pistas bajo la normativa SCCA, especialmente en EE.UU. En 1970 la saga Fairlady cedió paso al Datsun Z, heredando el nombre en su mercado local. El modelo más demandado y ofrecido en el mercado de clásicos actualmente es el SP311.
Particularidades y datos destacados del Datsun Fairlady
El Fairlady fue pionero para la industria japonesa, combinando motores de cuatro cilindros entre 1.2 y 2.0 litros con transmisiones manuales de 4 velocidades. Ganó reputación por su bajo peso y arquitectura tradicional de roadster, pero con fiabilidad mecánica superior al estándar europeo de la época. Destacan la victoria en el primer Gran Premio de Japón en Suzuka (1963) y la popularidad en carreras SCCA de EE.UU. El SP311 representa el 72,1% de la oferta de Fairladys en el mercado, concentrando también el 62,5% de la demanda de anuncios. Esto lo posiciona muy por encima de otras variantes en disponibilidad y búsquedas.
Datos técnicos del Datsun Fairlady
Versiones especiales y modelos destacados
Entre las ediciones más apreciadas se encuentran el Fairlady 2000 (SR311), solicitado tanto en competición como por coleccionistas debido a su motor U20, y la edición Z 432 presentada en 1970, caracterizada por su motor de 4 válvulas por cilindro, 3 carburadores y 2 árboles de levas, aunque estrictamente hablando marca el inicio de la saga Z. Igualmente, las unidades tempranas S211 y SPL212 son muy raras y codiciadas por su construcción artesanal.
Puntos débiles y mantenimiento del Datsun Fairlady
Aunque el Fairlady es famoso por su sencillez y fiabilidad, es conveniente revisar el sistema de frenos (aunque suelen estar presentes y funcionales en ejemplares ofrecidos), el estado de la instalación eléctrica y la corrosión en chasis y carrocería, frecuente en vehículos no restaurados. La facilidad para encontrar piezas depende del modelo y la motorización, siendo los SP311 y SR311 los más favorecidos por la comunidad de restauradores.
Motor, comportamiento y conducción
El Fairlady destaca por su bajo peso en vacío y reparto clásico de motor delantero y tracción trasera, proporcionando sensaciones directas similares a las de un deportivo británico de la época. Las versiones SP311 (1.6L) y SR311 (2.0L) ofrecen prestaciones honestas gracias a sus motores de cuatro cilindros, convertidos en referente incluso en competición SCCA en Norteamérica. La caja manual de cuatro relaciones transmite la potencia de manera vigorosa a la trasera, animando la conducción deportiva. Modelos destacados por su rendimiento: SP311 (1600) con 96 CV y SR311 (2000) con hasta 150 CV según configuración, ambos recordados por su robustez y fácil puesta a punto para competición.
Interior, confort y diseño exterior
El diseño del Fairlady refleja influencias americanas y europeas, especialmente en su frontal y proporciones bajas. Los acabados del habitáculo varían según la serie, con relojería clara y disposición ergonómica. Existen variantes con tapicería especial y colores distintivos, así como opciones con volante a la derecha o izquierda según destino. El parabrisas bajo y las líneas tensas realzan el carácter agresivo y elegante de la carrocería. Numerosos recambios y accesorios de época incrementan el atractivo de las unidades bien equipadas.
Otras características relevantes
En algunas unidades aún se puede encontrar equipamiento eléctrico original y combinaciones de pintura específicas del mercado japonés. Además, la comunidad internacional dedicada a los Fairlady facilita la restauración y mantenimiento, lo que mejora la experiencia de propiedad.
Resumen
El Datsun Fairlady se reafirma como roadster de referencia nipón entre 1959 y 1970, con gran parte de los ejemplares disponibles y buscados pertenecientes a la generación SP311. Con reminiscencias de los grandes deportivos europeos pero mecánica y calidad japonesa, ofrece todo lo necesario para los entusiastas del clásico nipón que buscan sensaciones analógicas y un legado histórico palpable.


