Plymouth Fury coches clásicos a la venta

Historia del Plymouth Fury

El Plymouth Fury se presentó en 1956 como una variante deportiva del Plymouth Belvedere, diseñado para posicionarse como un modelo de gama alta dentro de la marca. Su nombre se inspira en las Furias de la mitología griega, remitiendo a fuerza y dinamismo. Inicialmente, el Fury disponía de motores V8 con potencias significativas para la época, entre 290 y 315 caballos. A partir de 1959 se convierte en una línea independiente, y su equipamiento lo sitúa por encima del Belvedere. En los años sesenta, experimenta continuas renovaciones: en 1965 se introducen versiones denominadas Fury I, II, III y Sport, diferenciadas por equipamiento y prestaciones. El modelo supo adaptarse a los cambios del mercado, pasando de tamaño completo a mediano según la década. La variedad de motorizaciones V8, el confort interior y una estética americana marcada marcaron su evolución hasta el cese de la producción en 1978.

Evolución de la gama Plymouth Fury

El Fury empezó compartiendo plataforma con el Belvedere. En 1959 se establece como serie propia. En los sesenta se suma el convertible y la oferta se expande a diferentes submodelos como el Sport Fury y, temporalmente, el lujoso Plymouth VIP. La designación numérica I, II, III representa distintos niveles de acabado y potencia. En los setenta, debido a una reorientación de producto, el anterior Plymouth Satellite adopta el nombre Fury, mientras que los modelos de mayor tamaño pasan a llamarse Gran Fury. Entre 1975 y 1978, ambos coexistieron según mercado y versión, siempre propulsados por motores Chrysler V8. Esta versatilidad y evolución consolidan al Fury como una serie clave dentro del catálogo de Plymouth.

Aspectos destacados y cifras del Plymouth Fury

El Plymouth Fury es identificado por ser uno de los muscle cars estadounidenses más representativos, resaltando por su diseño clásico de carrocería full-size, el gran espacio interior y detalles cromados. Las versiones Sport Fury y GT ofrecieron aún más potencia y carácter. El modelo es conocido por su uso como vehículo policial y taxi, además de sus apariciones en la cultura popular y colecciones privadas. Particularmente rara y apreciada es la variante de 1968, equipada con motor 383cui V8 Big Block, transmisión automática de tres velocidades, tapizados de cuero y detalles originales.

Datos técnicos del Plymouth Fury

Ediciones especiales y coleccionables

El Sport Fury y el GT sobresalen entre las ediciones de mayor atractivo para coleccionistas, con un enfoque en prestaciones deportivas y acabado premium. Ocasionalmente, ciertas variantes se vendieron con equipamiento exclusivo o lotes limitados, identificados por documentación de fábrica como el Build Sheet y la Dealer Card. El convertible introducido en 1960 y el GT con motor de altas prestaciones destacan como los más cotizados.

Puntos débiles y consideraciones de mantenimiento

No se dispone de información específica sobre puntos débiles comunes para la gama Fury. Como vehículo clásico estadounidense, es recomendable inspeccionar el estado de la carrocería frente a la corrosión, así como el estado de la transmisión automática y el sistema de frenos por tratarse de componentes sujetos a desgaste en modelos de estas características.

Motor, prestaciones y experiencia de conducción

El Plymouth Fury se caracteriza por sus imponentes motores V8, destacando el 383cui (6.276 cm³) Big Block en la variante Sport Fury de 1968. La combinación con transmisión automática de 3 velocidades ofrece aceleración contundente y un comportamiento típico de los gran turismos americanos: gran confort, una suspensión blanda y un comportamiento noble en línea recta. Las versiones superiores, especialmente el GT, están pensadas para quien busca sensaciones fuertes y un rugido motor reconocible. Modelos destacados:

• Plymouth Sport Fury 1968: motor 383cui V8, caja automática 3V, gran espacio y detalles cromados.
• Fury GT: mayor potencia y equipamiento enfocado al rendimiento. Estas variantes sobresalen por conjugar potencia, dimensiones generosas y detalles clásicos.

Diseño interior, confort y acabados del Plymouth Fury

El interior del Plymouth Fury ofrece tapizados de cuero, salpicadero clásico y ornamentos en cromo. La amplitud interior es uno de sus grandes valores, permitiendo comodidad tanto para conductor como pasajeros. Externamente, los Fury de finales de los sesenta muestran líneas rectas, proporciones robustas y abundancia de cromados característicos de la época. Algunos modelos contaban con acabados personalizados y colores distintivos, como el blanco, muy representativo. El equipamiento opcional incluía aire acondicionado, radios de alta gama y accesorios exclusivos para el mercado estadounidense.

Otros aspectos destacables del Plymouth Fury

El Fury se afianzó como pieza imprescindible del imaginario estadounidense apareciendo en la televisión y el cine, con papeles memorables en "Peter Gunn" y “Christine” de Stephen King. Su uso como coche policial y de exhibición refuerza su valor histórico dentro y fuera del mundo automotriz.

Resumen del Plymouth Fury

El Plymouth Fury fusiona el carácter inconfundible de los muscle cars clásicos con la versatilidad y robustez de los grandes turismos americanos. Destaca por su potencia, acabados y relevancia cultural. Su presencia en el mercado de automóviles clásicos es indiscutible y atrae a quienes valoran una experiencia automovilística genuina y clásica.