1971 | Maserati Indy 4900

Auto Storica se complace de anunciar la venta de este Maserati Indy 4900

La respuesta de la marca del tridente a los clientes que pedían un coche rápido, cómodo y amplio como el México, pero con la deportividad del Ghibli, llegó en 1969. El nuevo modelo recibía el nombre de Indy, en homenaje a las victorias del Maserati 8CTF en las 500 millas de Indianápolis de 1939 y 1940.

Virginio Vairo, bajo el paraguas de Vignale, fue el artífice de su silueta. Un largo frontal en forma de cuña para cobijar la voluminosa mecánica, una línea de techo más alta que el Ghibli para ofrecer un mayor espacio para la cabeza a los pasajeros de las plazas traseras, y un maletero con una capacidad más que aceptable para el equipaje de cuatro adultos. Todo estaba pensado para recorrer largas distancias en el menor tiempo posible.

Y es que el Indy se ofreció con tres tipos de mecánicas, todas V8, siendo la que equipa nuestro protagonista la más rara y prestacional, pues durante tres años, de 1972 a 1975, tan solo se construyeron 300 ejemplares del Indy 4900.

Un V8 de 4931cc que rinde 300cv, enviados a las ruedas traseras mediante una caja manual ZF de cinco velocidades. Una mecánica que ha sido reconstruida por completo en nuestras instalaciones, lista para alcanzar de nuevo los 290Km/h que anunciaba Maserati en el momento de su presentación.

Y no solo su motor se ha restaurado en su totalidad, todo el coche ha sido sometido a una profunda inspección, revisando suspensión, chasis, frenos, así como todos los elementos clave, para que su única preocupación sea la de atravesar las autopistas de Europa disfrutando de la inigualable exclusividad de este exótico Gran Turismo italiano

¿Le han entrado unas incontrolables ganas de viajar? No se preocupe, es normal. Por cierto, el Maserati Indy le está esperando.